eficiencia energética en las calderas de gas

Hoy en día, la tendencia actual de nuestra sociedad es la de encontrar los sistemas más económicos y eficaces para nuestro uso diario. Calentar hogares, viviendas, inmuebles, oficinas de la mejor forma posible al menor precio. Eso es lo que se busca. En este post, vamos a centrarnos en la eficiencia energética en las calderas de gas como alternativa para el uso diario.

En un artículo anterior en este mismo espacio, desde SAEMAC ya os explicamos en detalle cómo es la escala de certificación energética. ¿sabes cuáles son los diferentes baremos o qué diferencia a unos de otros? No te preocupes. Estamos convencidos que esa lectura va a despejar la inmensa mayoría de tus dudas.

Por otro lado, tienes que tener presente que la ley establece un calendario y periodicidad de las inspecciones de eficiencia energética en las instalaciones térmicas de los edificios de potencia útil nominal superior a 70 kW. Por ello, es importante ir verificando el estado de cada instalación para tratar de mejorar las posibles deficiencias existentes.

La eficiencia energética en las calderas de gas es sinónimo de ahorro económico

Lo primero que tenemos que saber es que las calderas que usan gas natural y GLP son más económicas que las eléctricas. Esto se debe por el tipo de combustible que utilizan. Pero también por el enorme poder calorífico del gas natural. Esta característica permite lograr importantes ahorros en la factura de toda clase de comunidades e inmuebles.

El poder calorífico es un factor fundamental a la hora de medir la eficiencia energética en las calderas de gas. En este sentido, está totalmente contrastado que el poder del gas es muchísimo mayor al del gasoil, sin ir más lejos.

Pero no es la única razón que nos puede llevar a apostar por este combustible para todo tipo de instalaciones de calefacción y agua caliente. Su impacto medioambiental también es también inferior al que provocan otros combustibles fósiles. Esto es así tanto en su etapa de extracción como en la de elaboración, transporte o utilización.

Pese a todo ello, el precio actual del gas puede ser un factor preocupante para las familias. La alta eficiencia energética en las calderas de gas es un punto a favor, pero no implica que debamos despreocuparnos. Invertir en una caldera eficaz desde el punto de vista energético es el primer paso que debemos dar, pero no el único.

Otras opciones que tenemos para ahorrar diaria y mensualmente (que a la larga serán muy beneficiosas) son ponernos en manos de profesionales para la instalación y el mantenimiento. Solo así, nos aseguraremos que todo estará siempre a punto.

Como empresa experta en el mantenimiento de salas de calderas, uno de los factores en los que mas hacemos hincapié es en la gestión eficiente de los consumos y máximo aprovechamiento de combustibles y demás fuentes energéticas.